Por lo general, cuando algo está mal en nuestro cuerpo, una de dos cosas sucede. Algunas personas entran inmediatamente en pánico, se meten en Internet y en menos de una hora se han diagnosticado a sí mismas una enfermedad mortal o una afección rara. Otros ignoran el problema, ocultan el estrés y esperan que pase pronto. No es ideal dejarse llevar por ninguno de estos extremos, pero existe un término medio que puede ayudarte a mantener tu cuerpo en marcha y asegurarte de que no estás dejando nada grave sin diagnosticar.
«Creo que la frase más peligrosa conocida por la humanidad es ‘Quizás se te pase'», dice la directora general de Physical Advantage, Laurie Towers. «Hay momentos en los que las cosas no van a tener una resolución fácil en cuanto a la curación, y tenemos que saber cuándo buscar las respuestas correctas».
Ya sea algo en la piel, un problema en el estómago o un malestar general, es importante que sepas qué síntomas son normales y cuáles necesitas que te revisen. Para asegurarte de que no estás ignorando ninguna señal corporal importante, trata de no descartar ninguno de estos siete síntomas y pide una cita con tu médico para estar seguro. Y haga lo que haga, ¡no se asuste! No todo es siempre un problema grave, pero no está de más tomar precauciones.
Fatiga
«Hoy en día, con la glorificación de lo ocupado, es difícil saberlo», dice la nutricionista holística Sarah Jacobs. «Pero si notas que estás perpetuamente cansado, incluso después de dormir, o que tu cerebro no está funcionando tan rápido como de costumbre, podría ser una señal de un problema más serio».
La fatiga crónica a menudo puede señalar un problema de tiroides, un desequilibrio nutricional o una intolerancia alimentaria, entre otras posibilidades. «En lugar de confiar en el café para despertarse, es hora de buscar ayuda», dice Jacobs.
Salpullido en el pecho
Un salpullido en el pezón, también conocido como enfermedad de Paget, puede ayudar a diagnosticar posibles cánceres de mama u otras enfermedades mamarias.
«Es una placa crónica, eritematosa y escamosa que se forma alrededor de la zona del pezón de una mama», dice la dermatóloga Jill Waibel, MD. Si tienes algún enrojecimiento o descamación del pezón, acude a tu médico para que te revise el pecho.
Nudillos morados
Si tus nudillos se ven un poco inflamados y morados, puede ser un signo de dermatomiositis, una inflamación del tejido muscular subyacente que implica una disminución del colágeno y provoca decoloración e hinchazón.
«La dermatomiositis se presenta típicamente como una afección autoinmune asociada a cánceres internos, incluidos los de ovario, pulmón, páncreas y linfomas no Hodgkin, principalmente en caucásicos», dice Waibel.
Dolor después del ejercicio
Muchos de nosotros tendemos a pensar que «si no hay dolor, no hay ganancia», pero el dolor durante el ejercicio es a menudo una señal de que puede tener una lesión.
«‘Estaba en la mejor forma de mi vida’ a menudo precede a ‘antes de lesionarme'», dice la experta en fitness Debra Atkinson, MS, CSCS. «La forma física extrema y los objetivos impulsados nos llevan a lesiones que nos hacen perder todos los beneficios y nos hacen retroceder más que cuando empezamos.»
Movimientos intestinales irregulares
«Muchas personas experimentan una irregularidad ocasional, pero la definición generalmente aceptada de estreñimiento es tener menos de tres movimientos intestinales por semana, dificultad para defecar, o ambos», dice el gastroenterólogo certificado Dr. Anish Sheth.
Esto podría ser un signo de estreñimiento crónico idiopático (CIC) o del síndrome del intestino irritable (SII). Hablar de sus problemas con un médico puede ayudarle a determinar los cambios en la dieta y el estilo de vida o los medicamentos de venta libre que pueden ayudarle con el estreñimiento.
El peor dolor de cabeza de su vida
Todo el mundo tiene dolores de cabeza de vez en cuando, pero si el dolor se está volviendo extremadamente insoportable, podría ser un signo de algo peor.
«Los aneurismas cerebrales son relativamente infrecuentes, pero el ‘peor dolor de cabeza de la historia’ es una señal de que hay que comprobar si se trata de un problema grave», dice el Dr. David Parish. Si tiene un dolor localizado que le provoca náuseas o visión borrosa, debe acudir a un médico inmediatamente.
Cabello debilitado
«El debilitamiento del cabello en las mujeres puede ser un signo de algo más que un mal día de cabello», dice la doctora Arielle Levitan. «Puede significar problemas médicos subyacentes, como la enfermedad de la tiroides u otras enfermedades autoinmunes».
La disminución del cabello también puede ser un signo de una deficiencia nutricional, como la vitamina D o la vitamina B, o un desequilibrio hormonal.
Imágenes: vadymvdrobot/Fotolia; pulpolux/cgintimates/beeep/winemegup/toiletpaperholders/mislav-marohnic/littlesourire/Flickr
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