Antecedentes: El aceite de ricino, un potente catártico, se deriva del grano de la planta de ricino. Informes anecdóticos, que se remontan al antiguo Egipto, han sugerido el uso del aceite de ricino para estimular el parto. El aceite de ricino se ha utilizado ampliamente como método tradicional para iniciar el parto en la práctica de la partería. Su papel en el inicio del trabajo de parto es poco conocido y los datos que examinan su eficacia en un ensayo clínico son limitados. Esta es una de una serie de revisiones de los métodos de maduración cervical e inducción del parto utilizando una metodología estandarizada.
Objetivos: Determinar los efectos del aceite de ricino o de los enemas para la maduración cervical o la inducción del parto en el tercer trimestre en comparación con otros métodos de maduración cervical o de inducción del parto.
Estrategia de búsqueda: El registro de ensayos del Grupo Cochrane de Embarazo y Parto (Cochrane Pregnancy and Childbirth Group), el Registro Cochrane de Ensayos Controlados (Cochrane Controlled Trials Register) y las bibliografías de los artículos relevantes. Última búsqueda: Noviembre de 2000.
Criterios de selección: (1) ensayos clínicos que comparan el aceite de ricino, el baño o los enemas utilizados para la maduración cervical o la inducción del trabajo de parto en el tercer trimestre con placebo/ningún tratamiento u otros métodos enumerados por encima de él en una lista predefinida de métodos de inducción del trabajo de parto; (2) asignación aleatoria al grupo de tratamiento o al grupo de control; (3) ocultación adecuada de la asignación; (4) violaciones de la gestión asignada no suficientes para afectar materialmente a las conclusiones; (5) medidas de resultado clínicamente significativas informadas; (6) datos disponibles para el análisis según la asignación aleatoria; (7) datos que faltan insuficientes para afectar materialmente a las conclusiones.
Recogida y análisis de datos: Se ha desarrollado una estrategia para tratar el gran volumen y la complejidad de los datos de los ensayos relacionados con la inducción del parto. Esto implica un método de extracción de datos en dos etapas.
Resultados principales: En el único estudio incluido de 100 mujeres, que comparó una dosis única de aceite de ricino frente a ningún tratamiento, no se encontraron diferencias entre las tasas de cesárea (riesgo relativo [RR] 2,31; IC del 95%: 0,77; 6,87). No se presentaron datos sobre la mortalidad o morbilidad neonatal o materna. No hubo diferencias entre la tasa de líquido teñido de meconio (RR 0,77; IC del 95%: 0,25,2,36) o la puntuación de Apgar < 7 a los 5 minutos (RR 0,92; IC del 95%: 0,02,45,71) entre los dos grupos. El número de participantes fue pequeño, por lo que sólo pudieron detectarse grandes diferencias en los resultados. Todas las mujeres que ingirieron aceite de ricino sintieron náuseas.
Conclusiones del revisor: El único ensayo incluido en esta revisión intenta abordar el papel del aceite de ricino como agente de inducción. El ensayo fue pequeño y de mala calidad metodológica. Se necesitan más investigaciones para intentar cuantificar la eficacia del aceite de ricino como agente de inducción.