¿Qué es la menopausia?
La menopausia forma parte de un proceso gradual y natural en el que los ovarios producen cada vez menos hormonas femeninas, estrógeno y progesterona, y los períodos menstruales desaparecen gradualmente. Para la mayoría de las mujeres, este proceso comienza de forma silenciosa en torno a los 40 años, cuando los periodos pueden ser menos regulares. Este periodo de cambio se denomina perimenopausia o premenopausia. La edad media a la que las mujeres completan la menopausia es alrededor de los 51 años. Algunas mujeres experimentan la menopausia a edades más tempranas debido a un fallo ovárico prematuro, a una terapia contra el cáncer o a la extirpación quirúrgica de ambos ovarios.
¿Cuáles son los signos de la menopausia?
Cada mujer experimenta la menopausia de forma diferente. Los cambios en los niveles hormonales pueden causar una variedad de síntomas que pueden durar desde unos meses hasta unos años o más. Algunas mujeres tienen ligeras molestias o algo peor. Otras tienen pocas o ninguna molestia. Si alguno de estos cambios le molesta, consulte a su médico. Los síntomas más comunes son:
- Cambio en los períodos – Uno de los primeros signos puede ser la irregularidad de los períodos. Algunas pueden tener un flujo más ligero de lo normal; otras tienen un flujo más abundante y pueden sangrar mucho durante muchos días. Pueden ser más frecuentes y durar más tiempo. Puede haber manchado entre periodos.
- Bochornos – Un bochorno es una oleada repentina de calor en la parte superior o en todo el cuerpo.
- Problemas con la vagina y la vejiga – La sequedad, el picor y el ardor vaginales pueden hacer que las relaciones sexuales sean dolorosas. Las infecciones vaginales pueden ser más frecuentes. Algunas mujeres tienen más infecciones del tracto urinario o problemas para retener la orina.
- Sexo – Algunas mujeres descubren que sus sentimientos sobre el sexo cambian con la menopausia. Algunas tienen sequedad vaginal que hace que las relaciones sexuales sean dolorosas. Otras se sienten más libres después de la menopausia, aliviadas porque el embarazo ya no es una preocupación. Hasta que no haya pasado un año completo sin menstruación, debe seguir utilizando métodos anticonceptivos si no quiere quedarse embarazada. Después de la menopausia, la mujer puede seguir contrayendo enfermedades de transmisión sexual y debe asegurarse de que su pareja utilice un preservativo.
- Problemas de sueño – Algunas mujeres descubren que les resulta difícil dormir bien por la noche. Puede que no se duerman fácilmente o que se despierten demasiado pronto. Es posible que necesiten levantarse para ir al baño y luego no puedan volver a dormirse. Los sofocos pueden interferir con el sueño.
- Cambios de humor – Puede haber una relación entre los cambios en los niveles de estrógeno y el estado de ánimo de la mujer. Los cambios en el estado de ánimo también pueden ser causados por el estrés, los cambios familiares o la sensación de cansancio. La depresión no es un síntoma de la menopausia.
¿Afectará la menopausia a mi salud?
Hay dos problemas comunes que pueden empezar a producirse en la menopausia: la osteoporosis y las enfermedades cardíacas.
- Osteoporosis: Todos los días el cuerpo descompone el hueso viejo y lo sustituye por hueso nuevo y sano. El estrógeno ayuda a controlar la pérdida de hueso, por lo que la pérdida de estrógeno alrededor de la época de la menopausia hace que las mujeres empiecen a perder más hueso del que reemplazan. Con el tiempo, los huesos pueden debilitarse y romperse con facilidad. Esta condición es causada por la osteoporosis. Hable con su médico para ver si debe hacerse una prueba de densidad ósea para saber si corre el riesgo de sufrir este problema. Su médico también puede sugerirle formas de prevenir o tratar la osteoporosis. El ejercicio con pesas y una dieta rica en calcio y vitamina D pueden ayudar.
- Enfermedades del corazón: Después de la menopausia, las mujeres son más propensas a padecer enfermedades cardíacas. Los cambios en los niveles de estrógeno pueden ser parte de la causa. Pero, también lo es el envejecimiento. A medida que envejece, puede desarrollar otros problemas, como la presión arterial alta o el aumento de peso, que la exponen a un mayor riesgo de enfermedad cardíaca. Asegúrese de revisar regularmente su presión arterial y sus niveles de triglicéridos, glucosa en sangre en ayunas y colesterol LDL, HDL y total. Hable con su médico para saber qué debe hacer para proteger su corazón.
¿Qué pasa con la sustitución hormonal?
En la menopausia, su médico puede sugerirle que tome estrógenos y progesterona, lo que se conoce como terapia de sustitución hormonal o TRH. La TRH consiste en tomar estrógeno más progestina. El estrógeno solo, o TRE, es para las mujeres a las que se les ha extirpado el útero. El estrógeno más la progestina es para las mujeres con útero. La progestina, cuando se utiliza con estrógenos, ayuda a reducir el riesgo de cáncer de útero. Estas hormonas pueden tomarse en diversas formas, como píldoras, parches cutáneos, cremas o inserciones vaginales, dependiendo de las necesidades de la mujer.
La THS o la TRE pueden aliviar los síntomas relacionados con la menopausia, como los sofocos, y reducir la pérdida ósea; sin embargo, la THS tiene riesgos. No debe utilizarse para la prevención a largo plazo de enfermedades cardíacas. Tomar la THS aumenta, en lugar de reducir, el riesgo de padecer enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares. También aumenta el riesgo de cáncer de mama y de coágulos sanguíneos, pero parece disminuir el riesgo de cáncer de colon. Los científicos siguen estudiando los efectos de la THS. Hable con su médico sobre la posibilidad de tomar estrógeno/progestina o sobre otros tratamientos que puedan aliviar los síntomas de la menopausia.
¿Qué pasa con los fitoestrógenos?
Los fitoestrógenos son sustancias similares al estrógeno que se encuentran en los cereales, las verduras, las legumbres (frijoles) y algunas hierbas. Pueden actuar en el organismo como una forma débil de estrógeno. Algunos pueden reducir los niveles de colesterol. La soja, el ñame silvestre y hierbas como el cohosh negro y el dong quai, contienen fitoestrógenos y pueden aliviar algunos síntomas de la menopausia. El gobierno no regula los fitoestrógenos. Los científicos están estudiando algunos de estos estrógenos vegetales para averiguar si realmente funcionan y son seguros. Asegúrese de informar a su médico si decide consumir más alimentos con fitoestrógenos. Cualquier alimento o producto de venta libre utilizado por sus efectos similares a los de un fármaco podría interactuar con otros medicamentos recetados o provocar una sobredosis.
Puede obtener más información sobre la menopausia poniéndose en contacto con:
El Centro de Información del Instituto Nacional sobre el Envejecimiento