Su hijo ha sido diagnosticado de una enfermedad llamada rodilla de saltador. La rodilla de saltador es una irritación del tendón rotuliano, que conecta la rótula (patela) con la espinilla (tibia). Su hijo tendrá algo de dolor. Pero el dolor debería desaparecer con los cuidados adecuados.
¿Qué causa la rodilla de saltador?
La rodilla de saltador es el resultado de una sobrecarga de la rodilla. La afección suele producirse al practicar deportes como el baloncesto y el voleibol. Los niños que practican atletismo también están en riesgo. Los constantes movimientos de salto y aterrizaje de estas actividades suponen una carga para las rodillas. El tendón rotuliano se inflama entonces.
¿Cuáles son los signos y síntomas de la rodilla de saltador?
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Dolor en la parte inferior de la rótula
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Hinchazón alrededor de la parte inferior de la rótula
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Aumento del dolor cuando la rodilla está flexionada (doblada)
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Dolor con la actividad
¿Cómo se diagnostica la rodilla de saltador?
El médico le preguntará sobre los antecedentes de salud de su hijo y lo examinará. Durante el examen, el médico comprueba la sensibilidad de la rodilla de su hijo. También puede realizar una prueba de imagen, como una radiografía. Las pruebas de imagen muestran zonas del interior del cuerpo, como los huesos. Proporcionan al médico más información sobre la lesión de su hijo.
¿Cómo se trata la rodilla de saltador?
El médico de su hijo hablará con usted sobre el mejor plan de tratamiento para su hijo. Según las instrucciones, su hijo debe:
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Dejar de saltar o correr hasta que los síntomas desaparezcan, a menudo de 2 a 4 semanas.
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Helar la rodilla de 3 a 4 veces al día durante 15 a 20 minutos cada vez. Nunca ponga el hielo directamente sobre la piel de su hijo. Utilice una bolsa de hielo o una bolsa de guisantes congelados -o algo similar- envuelta en una toalla fina.
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Tome medicamentos antiinflamatorios, como el ibuprofeno, según las indicaciones.
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Use muletas, según las indicaciones.
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Utilice una correa para el tendón rotuliano (correa utilizada para sujetar la rodilla) durante el ejercicio, si se le indica.
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Haga ejercicios en casa según las indicaciones del médico. También es posible que su hijo sea derivado a un fisioterapeuta (PT) para un programa supervisado de ejercicios. El fisioterapeuta o el profesional sanitario de su hijo también puede pedirle que haga ejercicios en casa.
Preocupaciones a largo plazo
Con el tratamiento, la lesión debería curarse sin problemas. Tras la curación, cualquier dolor o restricción de la articulación de la rodilla debería desaparecer. Sin embargo, no descansar adecuadamente puede dar lugar a una fractura y a un período más largo de restricción de los deportes.