- 1. Introducción
- 2. Las formas más comunes de desalinización pueden dividirse en dos tipos de tecnología: Desalinización térmica (que utiliza energía térmica para separar el destilado del agua de alta salinidad), representada principalmente por la destilación de efecto múltiple (MED) y la destilación flash multietapa (MSF). La compresión mecánica de vapor (MVC) se utiliza principalmente para desalinizar aguas residuales de alta TDS (> 45.000 mg/l) y/o industriales con fines de reutilización y no necesariamente para usos potables. La separación por membranas de ósmosis inversa (OI), que utiliza una barrera de membranas y energía de bombeo para separar las sales del agua de alta salinidad (normalmente < 45.000 mg/l).
- 2.1 Capacidad total
- 2.2 Crecimiento y capacidad instalada por regiones
- 2.3 Capacidad instalada por tecnología
- 2.4 Capacidad instalada por aplicación y uso
- 3. Principales repercusiones en el coste de la desalación
- 3.1 Tecnología de desalinización
- 3.2 Ubicación
- 3.3 Calidad del agua bruta
- 3.4 Entrada y salida
- 3.5 Pretratamiento
- 3.6 Recuperación de energía
- 3.7 Energía eléctrica
- 3.8 Post-tratamiento
- 3.9 Costes de la infraestructura local
- 3.10 Regulaciones ambientales
- 4.0 Componentes del coste – CAPEX
- 5.0 Componentes de los costes – OPEX
- 6.0 Coste total para desalar agua
- 7.0 Ejemplos de costes de instalaciones de desalinización
1. Introducción
En la década de 1960, la desalinización surgió como uno de los medios más importantes para tratar el agua salina con el fin de llevarla a estándares de calidad de agua aceptables para su uso en diversas partes del mundo y sectores industriales (Ghaffour, et al., 2012). Los efectos del cambio climático, el crecimiento de la población y el aumento de la industrialización han desempeñado un papel importante en la escasez de agua y han tenido un impacto sustancial en la demanda de agua. Un gran número de países de África, Oriente Medio y Asia están sometidos a un grave estrés de agua dulce y se enfrentan a un aumento previsto de la escasez de agua hasta bien entrado el año 2025. También es importante tener en cuenta que casi el 40% de la población mundial vive a menos de 100 km de un océano o mar (Ghaffour, et al., 2012), lo que justifica que la desalinización de agua de mar sea una parte integral de la respuesta del planeta a la escasez de agua.
Este documento presenta una visión general del coste de la desalinización y de los principales componentes del coste de capital asociado (CAPEX) y del coste de operación y mantenimiento (OPEX). Se han presentado ejemplos de costes de instalaciones de desalinización para ilustrar la gama de costes que cabe esperar y para ayudar a la planificación conceptual y al desarrollo de proyectos de desalinización.
2. Las formas más comunes de desalinización pueden dividirse en dos tipos de tecnología:
- Desalinización térmica (que utiliza energía térmica para separar el destilado del agua de alta salinidad), representada principalmente por la destilación de efecto múltiple (MED) y la destilación flash multietapa (MSF). La compresión mecánica de vapor (MVC) se utiliza principalmente para desalinizar aguas residuales de alta TDS (> 45.000 mg/l) y/o industriales con fines de reutilización y no necesariamente para usos potables.
- La separación por membranas de ósmosis inversa (OI), que utiliza una barrera de membranas y energía de bombeo para separar las sales del agua de alta salinidad (normalmente < 45.000 mg/l).
Las tecnologías de desalinización son capaces de tratar el agua de una amplia variedad de fuentes, incluyendo, entre otras, las aguas subterráneas salobres, las aguas superficiales, el agua de mar y las aguas residuales domésticas e industriales. A medida que las tecnologías de desalinización se han ido desarrollando y mejorando, el coste de construcción de las plantas desalinizadoras ha disminuido. Esta disminución del coste ha sido uno de los principales factores de aceptación, crecimiento y éxito de la desalinización. Desde la década de 1960, el coste de la destilación flash multietapa (MSF) para desalinizar el agua se ha reducido aproximadamente por un factor de 10, con costes unitarios aproximados de 10,00 dólares/m3 en la década de 1960 a menos de 1,00 dólares/m3 (3,79 dólares por 1000 galones) en 2010. Actualmente, en 2017, en algunos lugares, el coste de la MSF ha disminuido hasta un 20% desde 2010 debido al desarrollo tecnológico y a la bajada de los precios de la energía. Del mismo modo, las mejoras tecnológicas en el diseño de las membranas y la integración de los sistemas han disminuido el coste de desalación del agua salobre en más de la mitad en las últimas dos décadas (Ghaffour, et al., 2012). Como ejemplo, en 2012 la Junta de Desarrollo del Agua de Texas estimó que el coste total de producción de la desalinización de aguas subterráneas salobres oscilaba entre 0,29 y 0,66 dólares por m3 de capacidad (entre 1,09 y 2,49 dólares por cada mil galones) (Arroyo, et al., 2012). Sin embargo, un estudio de la Asociación de Reutilización del Agua en 2012 mostró que las tendencias de los costes de los grandes proyectos de ósmosis inversa de agua de mar (SWRO) parecen haberse aplanado desde 2005, pero han variado ampliamente en el rango de 0,79 a 2,38 dólares por m3 (3,00 a 9,00 dólares por mil galones) de capacidad desde entonces (WRA, 2012). Esta amplia variación se debe a muchos factores y variables de coste, que se analizarán en la sección 3.
Los gráficos (Fig. 1 a 5) que aparecen a continuación muestran la capacidad total de desalinización y el crecimiento por tipo, ubicación y aplicaciones del usuario final.
2.1 Capacidad total
La capacidad total de desalación superó los 64 millones de m3/día en 2010 y se acercó a los 98 millones de m3/día en 2015. La figura 1 muestra cómo la capacidad ha crecido rápidamente en el siglo XXI (Fuente: GWI Desal Data & IDA).
Figura 1 – Capacidad total de desalación a nivel mundial (m3/d)
2.2 Crecimiento y capacidad instalada por regiones
La mayor capacidad de producción por ubicación se encuentra en Oriente Medio, debido a su falta de fuentes de agua dulce y a sus abundantes recursos energéticos, como se puede observar en las figuras 2 y 3. El mayor usuario de desalinización por capacidad es el Reino de Arabia Saudí, seguido de Estados Unidos, EAU, Australia, China, Kuwait e Israel.
Figura 2 – Capacidad de desalinización por país
En la Figura 3 se muestran los 15 principales mercados de desalinización durante un periodo de nueve años, de 2007 a 2016. Estados Unidos ha mostrado el mayor aumento de la capacidad instalada desde 2012.
Figura 3 – Cuota de mercado de desalación 2007 – 2016
2.3 Capacidad instalada por tecnología
La Figura 4 muestra la capacidad instalada frente a la tecnología. El tipo de tecnología de desalinización predominante en la actualidad es la ósmosis inversa (OI). El uso de la ósmosis inversa ha sido un compromiso entre el bajo OPEX (utilizando energía electromecánica frente a la típicamente más cara energía térmica) frente al alto CAPEX (debido al coste y a la vida relativamente corta de las membranas, por lo que el coste de sustitución es alto). A lo largo de los años, los precios de las membranas se han reducido drásticamente y su vida útil ha aumentado gracias a un mejor pretratamiento del agua de alimentación y a una mejor comprensión del funcionamiento de los sistemas de ósmosis inversa.
Figura 4 – Capacidad mundial total por tipo de desalinización
2.4 Capacidad instalada por aplicación y uso
La figura 5 ilustra la cuota de mercado de la desalinización por aplicación del usuario final. El uso municipal para la desalinización compromete la mayor parte de la capacidad total instalada, seguida de los usos industrial, energético, de riego y turístico.
Figura 5 – Capacidad mundial de desalinización por aplicación del mercado
Los factores señalados anteriormente (sección 2), como la capacidad, la ubicación, el tipo y la aplicación, tienen un impacto significativo en el coste. Hay otros factores importantes específicos de cada emplazamiento que repercuten directamente en el coste de la desalación, que se analizan en la siguiente sección.
3. Principales repercusiones en el coste de la desalación
Los factores que repercuten directamente y de forma importante en el coste de la desalación son, entre otros, la tecnología de desalación, la calidad del agua bruta y del producto, el tipo de entrada y salida, la ubicación de la planta o del proyecto, el tipo de recuperación de energía utilizado, el precio de la electricidad, las necesidades de postratamiento, el almacenamiento, la distribución, los costes de las infraestructuras locales y la normativa medioambiental.
3.1 Tecnología de desalinización
Casi el 95 por ciento de la capacidad de desalinización instalada en la actualidad es tecnología térmica (35%) o basada en membranas (60%) (Ghaffour, et al., 2012). Cada tipo de sistema varía considerablemente en cuanto a la huella, los materiales de construcción, los equipos, los requisitos de pretratamiento y las necesidades de energía y vapor, entre otras diferencias. La selección de la tecnología también determinará el tipo de productos químicos que se utilizarán para el pretratamiento y el postratamiento, lo que repercute en los costes operativos.
3.2 Ubicación
El lugar donde se construye una instalación de desalinización puede tener un gran impacto en los costes generales del proyecto. Por ejemplo, en el caso de una planta de desalinización SWRO (Ósmosis Inversa de Agua de Mar), la planta debería estar situada lo más cerca posible de la fuente de toma de agua de mar para evitar costes más elevados de las tuberías de toma y de las complejas estructuras de toma. La ubicación óptima del proyecto también reducirá la línea de descarga de salmuera concentrada al mar. Sin embargo, el coste de adquisición de los bienes inmuebles es un factor importante que puede requerir una mayor transmisión de agua en lugares donde el coste del terreno puede presentar diferencias de órdenes de magnitud en distancias relativamente cortas. Desde el punto de vista de la construcción, se recomienda tener muy en cuenta aspectos como las condiciones locales del suelo (pueden requerir nuevos rellenos o pilotes de hormigón estructural) y la proximidad a una fuente de energía fiable para reducir los costes de transmisión de energía.
3.3 Calidad del agua bruta
La calidad del agua bruta específica del emplazamiento puede tener un impacto importante en el número y el tipo de pasos de pretratamiento necesarios antes de la etapa de desalinización propiamente dicha, así como en el dimensionamiento global de la planta desalinizadora. El nivel de sólidos disueltos totales (TDS) del agua de origen repercute directamente en los costes de explotación, ya que las presiones de funcionamiento (ósmosis inversa) y las temperaturas (térmicas) deben aumentar normalmente a medida que aumenta la salinidad del agua bruta. Una mayor salinidad del agua bruta también puede reducir la recuperación factible de agua de producto por galón de agua bruta, tanto para los sistemas de ósmosis inversa como para los térmicos. En el caso del SWRO, en zonas como pequeñas bahías, golfos o canales, las corrientes de agua de mar y la mezcla natural resultante de la mayor masa de agua de mar (es decir, el océano) pueden ser mínimas. Estas zonas pueden tener niveles locales de salinidad más altos, un total de sólidos en suspensión más elevado, variaciones de temperatura más altas y cargas orgánicas y actividad biológica más elevadas en comparación con el agua del océano abierto. Todos estos factores añaden complejidad al diseño y a la construcción y, por lo tanto, pueden aumentar significativamente los costes de CAPEX y OPEX.
Además, la temperatura del agua de alimentación tiene un gran impacto en los costes de la presión de funcionamiento de la ósmosis inversa, ya que la presión de alimentación aumenta entre un 10 y un 15 por ciento por una caída de 10 ⁰F en la temperatura del agua de alimentación por debajo de 70 ⁰F (WRA, 2012).
Para un sistema de ósmosis inversa, la calidad del agua de producto requerida dictará el número de pases de membrana necesarios, lo que repercutirá en los costes.
3.4 Entrada y salida
El tipo de entrada y salida seleccionado para una planta desalinizadora es una de las consideraciones técnicas más importantes para el diseño rentable y el funcionamiento óptimo de una planta. Hay que evaluar factores importantes como el tipo de toma más adecuado (toma sumergida o abierta), la distancia de la toma con respecto a la planta, el tipo de rejillas de toma, el tipo de estructura de toma, el tipo de tubería de toma (enterrada o en la superficie) y las consideraciones medioambientales con respecto al impacto y el arrastre de la vida marina. Cada uno de estos elementos tiene un impacto significativo en los costes. El coste del sistema de toma puede variar desde un mínimo de 0,13 millones de dólares por cada mil m3/día (0,5 millones de dólares por MGD) de capacidad para una toma abierta hasta 0,79 millones de dólares por cada mil m3/día (3,00 millones de dólares por MGD) para tomas complejas en túnel y en alta mar (WRA, 2012).
Para ilustrar la importancia potencial de los costes de las estructuras de toma y descarga, las descargas de las plantas SWRO situadas cerca de hábitats marinos muy sensibles a la salinidad elevada requieren sistemas elaborados de difusores de descarga de concentrados, con costes que pueden superar el 30% de los gastos totales del proyecto de desalinización. En cambio, las plantas desalinizadoras con los costes de producción de agua más bajos tienen descargas de concentrados situadas en zonas costeras con una mezcla natural muy elevada o están combinadas con estructuras de salida de las centrales eléctricas, lo que permite una buena mezcla inicial y una mejor disipación de la pluma de descarga. Los costes de las instalaciones de toma y descarga de estas plantas suelen ser inferiores al 10% de los costes totales de la planta desalinizadora (WRA, 2012).
3.5 Pretratamiento
Los costes de pretratamiento se ven afectados por el tipo y la complejidad del sistema de pretratamiento. El tipo de pretratamiento necesario depende de la calidad del agua bruta en el lugar del proyecto. Algunas fuentes de agua bruta de mar o de aguas superficiales salobres tienen un alto nivel de sustancias orgánicas y actividad biológica y requieren tecnologías de pretratamiento más robustas, como la DAF (flotación por aire disuelto) y la UF (ultrafiltración). Otras fuentes de agua bruta que utilizan tomas sumergidas o tomas basadas en pozos pueden requerir menos pretratamiento, como una filtración de medios de un solo paso o MF (Microfiltración).
Según un artículo de la Water Reuse Association titulado «Seawater Desalination Costs» (Costes de desalinización del agua de mar), los costes de pretratamiento suelen oscilar entre 0,13 y 0,40 millones de dólares por cada mil m3/día (entre 0,5 y 1,5 millones de dólares por MGD). En el extremo inferior de este rango, los sistemas convencionales de filtración de medios de una sola etapa son adecuados. Los costes de pretratamiento aumentan a medida que se añaden etapas de pretratamiento adicionales, como los filtros de medios de dos etapas o la filtración de medios seguida de sistemas de MF o UF.
Los costes de pretratamiento suelen ser mayores si la fuente de agua es el agua residual. Esto puede deberse a muchos factores, como la necesidad de eliminar los altos niveles de calcio y magnesio (dureza), la adición de pasos de cloración y decloración para destruir los microbios, o la necesidad de utilizar UF para eliminar los compuestos orgánicos de alto peso molecular.
3.6 Recuperación de energía
Los sistemas SWRO utilizan bombas de alta presión para superar la presión osmótica del agua bruta de alimentación. Por ejemplo, algunas plantas SWRO pueden requerir presiones de alimentación de hasta 70 bares (1000 psig). La corriente de salmuera concentrada de ósmosis inversa de este proceso contiene energía de presión que puede recuperarse para reducir los requisitos energéticos generales del sistema de ósmosis inversa. Las tecnologías de recuperación de energía reducen la entrada total de energía, reduciendo así los gastos de funcionamiento.
3.7 Energía eléctrica
Los precios locales de la energía, la distancia de transmisión, las tasas de conexión y, posiblemente, las tarifas en la ubicación propuesta para la instalación de desalinización desempeñan un papel importante a la hora de determinar el precio de suministro de la energía conectada. En el caso de las plantas de desalinización térmica de gran tamaño, la consideración de ubicar la instalación junto con una central eléctrica puede ser prometedora debido a las ventajas inherentes a dicha combinación.
3.8 Post-tratamiento
La calidad del agua del producto final determinará el tipo específico de post-tratamiento que se requiere. Los pasos de postratamiento añaden costes adicionales. La necesidad de una segunda pasada de ósmosis inversa para lograr niveles muy bajos de TDS o reducir las concentraciones de iones específicos, como el boro o el cloruro, a niveles aceptables puede ser una opción costosa. Un sistema de ósmosis inversa de dos pases suele ser entre un 15 % y un 30 % más costoso que un sistema de ósmosis inversa de un solo pase (WRA, 2012).
Además, la estabilización del agua producida suele requerir un ajuste del pH y la adición de alcalinidad de bicarbonato, que puede realizarse mediante una combinación de dióxido de carbono, cal y/o hidróxido de sodio y, de nuevo, esto añade un coste adicional.
Para las plantas de desalinización situadas en una costa cercana a las comunidades que utilizan el agua, el terreno suele tener un precio elevado. El coste de ubicar una instalación más cerca del punto de uso y de una fuente de energía adecuada debe sopesarse frente a los costes asociados a los derechos de paso de las tuberías de toma y descarga adicionales, los costes de las tuberías, el transporte de materiales, los permisos, la mano de obra y el mantenimiento asociados al traslado de una planta más lejos de la costa o del área de servicio de distribución (WRA, 2012).
Los costes de postratamiento suelen ser mayores si la fuente de agua es el agua residual. Esto puede deberse a muchos factores, como la oxidación posterior al tratamiento para inactivar los virus y los mayores costes de eliminación de salmueras o sólidos residuales.
3.9 Costes de la infraestructura local
Los costes de la infraestructura incluyen elementos como el movimiento de tierras, el hormigón, el acero, las estructuras, el drenaje y los materiales de construcción. Dependiendo de la ubicación de la planta, los costes de cada uno de estos elementos pueden variar significativamente. Los emplazamientos de plantas remotas que se encuentran lejos de las ciudades industriales normalmente tendrán que incurrir en mayores costes de construcción frente a las plantas que se construyen cerca de las instalaciones de producción de hormigón y de las zonas industriales que tienen un amplio suministro de materiales de construcción.
3.10 Regulaciones ambientales
Cada región geográfica tendrá su propio conjunto de normas y regulaciones ambientales, y éstas también pueden variar de un estado a otro dentro de un mismo país. Por ejemplo, los costes de autorización de los proyectos en California son casi cuatro veces superiores a los costes típicos de autorización en Florida (WRA, 2012). California tiene reglamentos y/o directrices más estrictos para la producción de agua potable en comparación con los de Texas o Florida, lo que añade costes de regulación a un proyecto de desalinización. Los periodos de revisión ambiental más largos también pueden alargar el calendario del proyecto, lo que suele traducirse también en un mayor coste del mismo. De hecho, el número de años necesarios para desarrollar y autorizar un proyecto en un estado como California, con regulaciones muy estrictas, puede ser significativamente mayor que el tiempo necesario para construir la planta e iniciar la puesta en marcha. (WRA, 2012)
4.0 Componentes del coste – CAPEX
El CAPEX se subdivide en las dos categorías principales de costes directos e indirectos. Los costes directos incluyen el equipo, los edificios y otras estructuras, las tuberías y el desarrollo del emplazamiento, y suelen representar entre el 50% y el 85% del total del CAPEX. Los costes indirectos restantes incluyen los intereses y tasas de financiación, los costes de ingeniería, legales y administrativos, y los imprevistos (Ghaffour, et al., 2012). Los costes típicos de CAPEX y sus componentes para la mayoría de las plantas de desalinización pueden dividirse en nueve partes, a saber: toma y transporte de agua bruta; pretratamiento; tratamiento de desalinización; postratamiento; bombeo y almacenamiento de agua de producto; sistema eléctrico y de instrumentación; edificios de la planta, sitio y obras civiles y balance de la planta; descarga de salmuera y manejo de sólidos; y costes diversos de ingeniería y desarrollo. También hay que tener en cuenta otros costes, como los de financiación y otros relacionados con el comercio. La figura 6 muestra un ejemplo de desglose de costes CAPEX para una planta SWRO.
Figura 6 – Desglose del CAPEX típico de una planta de desalinización SWRO (Fuente: Advisian)
El CAPEX, en gran medida, depende de la escala, ya que las plantas de desalinización más grandes cuestan menos por millón de galones de capacidad instalada. Según la figura 7, la construcción de una planta SWRO de tamaño medio de 10 MGD costaría unos 80 millones de dólares y la de una planta grande, como la SWRO de 35 MGD de Carlsbad, cerca de San Diego, costaría 250 millones de dólares. Nota: Debido a problemas medioambientales, de permisos y de construcción, esa planta acabó costando mucho más.
Figura 7 – Coste de construcción por unidad frente a la capacidad de las plantas de SWRO
5.0 Componentes de los costes – OPEX
Los costes de explotación (OPEX) se dividen generalmente en dos grandes categorías: costes fijos (como los costes de mano de obra, administrativos, de sustitución de equipos y membranas, y tasas/impuestos sobre la propiedad, etc.) y costes variables (como la energía, los productos químicos y otros consumibles. (Arroyo, et al., 2012). El coste OPEX típico y sus componentes para la mayoría de las plantas desalinizadoras pueden subdividirse en nueve partes que comprenden lo siguiente: consumo de energía, consumibles, residuos sólidos, productos químicos, mano de obra, mantenimiento, garantía de los equipos, balance de los servicios públicos de la planta & y otros costes fijos (administración, repuestos, imprevistos, etc.), como se muestra en la Figura 8.
Figura 8 – Desglose del OPEX típico de una planta desalinizadora SWRO (Fuente: Advisian)
6.0 Coste total para desalar agua
El coste del ciclo de vida, también llamado coste de producción unitario o coste anualizado, es el coste de producir mil galones o un metro cúbico de agua por desalación y considera todos los CAPEX (incluyendo el servicio de la deuda) y OPEX, y puede ser ajustado por un factor de funcionamiento de la planta previsto o real. Debido a todas las variables que intervienen, estos costes anualizados pueden ser muy complejos, y las diferencias de costes de producción unitarios entre proyectos pueden no ser directamente comparables. En el mejor de los casos, la predicción de los costes futuros a partir de la información sobre los costes de la planta en el pasado sólo dará lugar a estimaciones aproximadas.
La figura 9 muestra que los costes anualizados de los distintos tipos de proyectos de ósmosis inversa completados han variado mucho. Los costes medios, representados por la línea de mejor ajuste en los datos mostrados, son de unos 0,70 dólares/m3 (2,65 dólares por cada mil galones) para las plantas muy grandes (325.000 m3/día) y se elevan a 1,25 dólares/m3 (4,75 dólares por cada mil galones) para las plantas pequeñas (10.000 m3/día).
Sin embargo, los costes pueden ascender a 3,20 $/m3 en el caso de plantas de muy pequeña capacidad (menos de 4.000 m3/día o 1 MGD) que presentan costosas peculiaridades de captación, vertido y transporte específicas del lugar. Si se eliminan los efectos de la toma, la descarga y la conducción, se reduce y estrecha el rango de costes anualizados a 0,53 $/m3 a 1,58 $/m3 (2,00 $ o 6,00 $ por cada mil galones) para las plantas de SWRO y a 0,11 $ a 1,10 $/m3 (0,40 $ a 4,00 $ por cada mil galones) para las plantas de RO de agua salobre (WRA, 2012).
Figura 9 – Coste de producción unitario de una planta de ósmosis inversa frente a la capacidad del proyecto
El coste de desalinizar aguas residuales industriales para su reutilización puede ser mucho mayor. Por ejemplo, WorleyParsons/Advisian realizó un estudio para desarrollar el CAPEX y OPEX de una planta desalinizadora de 35.000 m3/día situada en la región del Golfo Pérsico y alimentada con agua producida en campos petrolíferos y que produce agua de alimentación de calderas. Basándose en los costes presupuestarios de CAPEX y OPEX generados en ese estudio, el coste de producción unitario era aproximadamente cuatro veces superior al que se preveía utilizando la Figura 9.
La Figura 10 muestra una comparación del coste del ciclo de vida típico de MSF, MED y SWRO para producir un metro cúbico (264 galones) de agua al día. Como se muestra, MSF y MED, que son tecnologías de desalinización térmica, requieren vapor (energía térmica) además de energía eléctrica, que es la razón principal por la que tienen mayores costes totales del ciclo de vida del agua en comparación con SWRO.
Figura 10 – Coste unitario de producción de agua para las tecnologías de desalación
7.0 Ejemplos de costes de instalaciones de desalinización
Como se ha señalado en este documento, el coste de desarrollo, construcción y explotación de una instalación de desalinización depende de la ubicación de la planta, del tipo y la calidad del agua bruta, del tipo de entrada y salida, de la tecnología de desalinización y de los sistemas de recuperación de energía utilizados, del coste de la energía eléctrica, de cualquier postratamiento y almacenamiento necesarios, de los costes de distribución y de la normativa medioambiental. Estas diferencias pueden hacer que una gran planta construida en una región del mundo sea más cara que una planta más pequeña construida en otra región del mundo y dar lugar a diferencias significativas en el OPEX. Esto queda ilustrado por los proyectos que se muestran en la
Tabla 1 para tres plantas SWRO situadas en distintos lugares del mundo, como Estados Unidos, Oriente Medio y Australia.
Región |
Estados Unidos |
Golfo Árabe |
Australia |
Nombre del proyecto |
Proyecto de desalinización de Charlsbad |
Fujairah F1 Extension SWRO |
Planta desalinizadora de la Costa Dorada |
Localización de la planta |
Carlsbad, CA, USA |
Fujairah, UAE |
Tugin, Australia |
Fecha de construcción de la planta |
2014 |
2013 |
2009 |
Capacidad de la planta m3/d (MGD) |
189,000 (50) |
136,000 (30) |
133,000 (35.1) |
Recuperación de plantas |
45-50% |
45-50% |
45% |
Salinidad del agua bruta (ppm) |
36,000 |
45,000 |
38,000 |
Calidad del agua del producto (ppm) |
200 |
500 (norma de la OMS) |
200 |
Tipo de toma |
Toma abierta, co-ubicación |
Administración abierta |
Administración abierta, pantallas de tambor, túnel de entrada/salida |
Tipo de pretratamiento |
Filtración de doble medio |
Flotación por gas disuelto + filtración |
Filtración por dos medios |
Tecnología de desalinización |
2 Pass SWRO |
2 Pass SWRO |
2 Pass SWRO |
Tipo de tipo de recuperación |
ERI |
ERI |
DWEER ERD |
Post-tratamiento |
Adición de CO2 y cal, cloración, fluoración |
Adición de CO2 y cal, cloración |
Adición de CO2 y cal, cloración, fluoración |
Almacenamiento y distribución |
3.4 MG + 10 millas de tubería de transporte y bombeo |
NA |
8 MG + 16 millas de tubería + bombeo |
Descarga de la salmuera |
Directa al mar con central |
Directa al mar |
300 metros en el mar, difusores |
Normas medioambientales |
Muy estrictas |
Moderadas |
Stringente |
Energía específica (kwh/ m3) |
N/A |
3.7 – 4,0 |
3,40 |
Coste de las TIC (US$) |
692.000.000 |
$200.000.000 |
$943.000.000 |
Vida útil proyectada, años |
20 |
20 |
20 |
Capital simple anualizado, US$/año |
N/A |
N/A |
47.150.000$ |
OPEX (US$/año) |
53.100$,000 |
$26,900,000*2 |
$32,000,000 |
Costo de producción unitario, US$/m3-día |
$1.86 *1 |
<$0,60 |
$1,63 |
*1 Coste total de la unidad para el propietario, que incluye los pagos, las tasas de financiación del gasoducto, las mejoras de construcción varias, los costes de O/M varios y los costes administrativos. *2 Estimación
- Noreddine Ghaffour, Thomas M. Missimer, Gary L. Amy. «Revisión técnica y evaluación de los aspectos económicos de la desalinización del agua: Retos actuales y futuros para mejorar la sostenibilidad del suministro de agua». Water Desalination and Reuse Center KAUST, octubre de 2012.
- Jorge Arroyo, Saqib Shirazi. «Coste de la desalación de agua subterránea salobre en Texas», septiembre de 2012.
- Asociación de Reutilización de Agua. «Seawater Desalination Costs», enero de 2012.
- Pankratz, Tom. Informe sobre la desalinización del agua, 2010.
- Crisp, Gary. «Desalination in Australia» presentación, mayo de 2010.
- San Diego County Water Authority. «Overview of Key Terms for a Water Purchase Agreement between the San Diego County Water Authority and Poseidon Resources» presentation, September 2012.
- GWI Desal Data & IDA (Int. Desal. Association) for Figure 1, Figure 3, Figure 5, Figure 10.
- Xavier Bernat, Oriol Gibert, Roger Guiu & Joana Tobella, Carlos Campos. «La economía de la desalación para diversos usos». Centro Tecnológico del Agua, Barcelona, España.
- Robert Huehmer, Juan Gómez, Jason Curl, Ken Moore. «Modelización de costes de los sistemas de desalación». Desalination Global Technology Leader, CH2M HILL, USA.
- Gleick H. Peter, Heather Coooley. «El agua del mundo 2008-2009: The Biennial Report on Freshwater Resources», Pacific Institute.
- Global Water Intelligence. Volume 12, Issue 12, December 2011.