¿A qué le tiene miedo? Los temores quirúrgicos ocupan un lugar destacado entre los adultos, lo que provoca estrés y evasión. Aquí hay 5 cosas que necesita saber para lidiar con ello.
Estar nervioso es común
La mayoría de la gente siente cierta incertidumbre antes de la cirugía. Eso es natural e incluso esperable. Cuando los sentimientos van más allá de un simple caso de nervios, se llama ansiedad quirúrgica. Incluso hay un término médico para ello: tombofobia. En casos extremos, los miedos médicos impiden la atención sanitaria necesaria o habitual.
Los principales miedos quirúrgicos
Todos nos ponemos nerviosos ante una operación, pero nos ponen nerviosos las mismas cosas. Los principales miedos incluyen:
- Muerte
- Dolor
- Pérdida de control
- Resultados quirúrgicos
- Impacto financiero
- Impacto en el estilo de vida
- Despertar durante la cirugía
- Errores quirúrgicos
- Cicatrices u otras desfiguraciones
- Agujas y otros equipos médicos
Síntomas de la ansiedad quirúrgica
Aunque la ansiedad quirúrgica es muy común, los síntomas son desagradables y pueden alterar la vida antes de la cirugía, dejándole incapaz de relajarse y aumentando el estrés. Ese nivel de ansiedad puede llegar a afectar a su recuperación y a la forma en que experimenta el dolor.
Incluso si no tiene un miedo definido, puede experimentar síntomas de ansiedad quirúrgica.
Los síntomas de la ansiedad quirúrgica incluyen:
- Latidos acelerados
- Sudoración
- Náuseas o estómago nervioso
- Latidos irregulares
- Dificultad para respirar
- Problemas para dormir
La ansiedad puede ser un círculo vicioso, ya que el estrés y los síntomas físicos provocan insomnio, lo que a su vez empeora la ansiedad. Siga leyendo para obtener consejos para controlar la ansiedad y saber cuándo buscar ayuda.
Cálmese
Muchos miedos pueden aliviarse o disminuirse simplemente buscando información. Infórmese sobre su enfermedad, la cirugía y la recuperación prevista. Haga preguntas en las citas, en las pruebas preoperatorias y en el registro. Su médico y su anestesista son buenas fuentes de información objetiva.
Los consejos para disminuir la ansiedad incluyen:
- Lea cuidadosamente y siga todas las instrucciones previas a la cirugía
- Aumente su calma general en las semanas previas a la cirugía con yoga, masajes, meditación, acupuntura u otras actividades agradables
- Prepare su cuerpo para la cirugía. Céntrese en comer de forma saludable, descansar y mantenerse activo
- El día de la operación: escuche música, lea un libro emocionante o incluso abrace a su mascota antes de dirigirse al hospital – todos son reductores de estrés probados
Comparta su miedo
Cuando Kristin, de 45 años, necesitó una operación de reconstrucción del ligamento cruzado anterior (LCA), se preocupó por el dolor que suponía. Ver un vídeo de la intervención no hizo más que aumentar su ansiedad. Finalmente admitió sus temores a su anestesista, pero sólo después de que éste la descubriera hiperventilando en un vestuario. «Inmediatamente me aseguró que no me despertaría con dolor», dice Kristin. «También me dio enseguida una medicación que me hizo relajar. En lugar de huir, sentí que podía echarme una siesta».
Es esencial buscar ayuda para la ansiedad grave, sobre todo cuando el miedo hace que te plantees cancelar o posponer la cirugía, o cuando la ansiedad hace que no puedas seguir con tu vida normal. Hable con su cirujano, pida apoyo a sus familiares y amigos o busque un grupo de apoyo para la cirugía o para su enfermedad específica. Compartir su miedo puede ser un alivio y hablar con otras personas puede ser inmensamente beneficioso.
Si su ansiedad persiste incluso después de conocer su procedimiento y reunir apoyo, su médico puede prescribirle medicamentos contra la ansiedad y remitirle a terapia. En los casos en que la cirugía puede tener un impacto importante, como la extirpación de un pecho o la posible pérdida de la vista, el asesoramiento puede ayudarle a afrontar los cambios. La mayoría de los terapeutas pueden proporcionarle ejercicios que le ayuden a controlar la ansiedad y los síntomas físicos.
Independientemente de cómo decida manejarse, no deje que el estrés o el miedo le impidan someterse a cualquier procedimiento médico necesario.