La causa de la fiebre es sencilla, y es normal experimentar fiebres. Esto se debe a que la fiebre es la respuesta natural del cuerpo a las bacterias y los virus que penetran en los sistemas de defensa habituales. Cuando estos invasores entran en el cuerpo, el sistema inmunitario responde elevando la temperatura a un nivel en el que muchas bacterias y virus ya no pueden sobrevivir. En general, una fiebre baja no es preocupante y debería disiparse en un periodo de varios días. Sin embargo, es difícil para el individuo medio determinar cuándo una fiebre debería ser preocupante, especialmente porque las fiebres ocurren frecuentemente junto con otros síntomas como la tos, el dolor de garganta y la somnolencia.
¿Qué se considera fiebre?
El primer paso para identificar los tipos de fiebre es averiguar si alguien tiene o no una en primer lugar. Desgraciadamente, como la fiebre se desarrolla internamente, puede haber cierta confusión sobre cómo medirla. La forma más sencilla de medirla es utilizando un termómetro humano diseñado para ser introducido por vía oral o rectal para obtener una lectura adecuada.
Debido a que existe cierta variación natural en la temperatura del cuerpo humano, no existe un valor único que represente la fiebre. Sin embargo, los profesionales médicos están de acuerdo en que las siguientes temperaturas se consideran fiebre cuando se toman con los métodos asociados:
Una vez que una persona sabe cómo medirla, el siguiente paso es identificar el tipo de fiebre y lo que la está causando.
¿Cuáles son los tipos de fiebre?
Hay múltiples tipos de fiebre, y cada uno de ellos debe tratarse de forma diferente para gestionar adecuadamente la causa de los síntomas. A la hora de determinar el mejor tratamiento para una enfermedad, los profesionales médicos tienen en cuenta el tipo de fiebre, así como su duración, para crear un diagnóstico diferencial y un manejo adecuado.
La mayoría de las fiebres se clasifican en una de las cinco categorías:
- Continua: Fiebre que mantiene su temperatura durante 24 horas con una variación de temperatura de 1 grado Fahrenheit
- Cíclica Recurrente: Una fiebre que se repite a lo largo de varias semanas con intervalos de períodos libres de síntomas entre cada recurrencia
- Intermitente: Un periodo que ocurre a la misma hora en 24 horas durante varios días con periodos sin síntomas entre cada ocurrencia
- Remitente: Fiebre en la que la temperatura está por encima de lo normal durante todo el día y fluctúa en 2 grados centígrados a lo largo de las 24 horas
- Séptica: Fiebre de alta temperatura que no mejora cuando la persona que la padece toma antipiréticos (reductores de la fiebre)
Qué hacer cuando no se puede identificar una fiebre
Si usted o un ser querido está sufriendo fiebre y no puede determinar a qué categoría pertenece, es posible que le preocupe buscar el tratamiento médico adecuado. A veces un individuo podría estar sufriendo lo que se llama «fiebre de origen desconocido». Esta fiebre alcanza temperaturas superiores a los 101 grados Fahrenheit, dura más de tres semanas y no está asociada a otros síntomas como la pérdida de peso.
Cuando alguien tiene una fiebre de origen desconocido, es importante visitar un hospital inmediatamente, ya que la fiebre puede ser un signo de un pronóstico grave como una infección persistente o una enfermedad de larga duración. Al fin y al cabo, el cuerpo está luchando para combatir algún tipo de invasión y necesita ayuda.
Además de las fiebres de origen desconocido, puede ser difícil controlar adecuadamente los síntomas asociados. Cuando la fiebre supera los 100 grados Fahrenheit, es el momento de preocuparse. Cuando el cuerpo mantiene una fiebre alta, puede empezar a dañarse o a perder el control de la regulación de la temperatura. Por término medio, cualquier fiebre de más de 100,4 grados en un niño es motivo de preocupación, mientras que los adultos pueden mantener una fiebre de hasta 102 grados antes de que sea necesaria la intervención médica.
Qué hacer con la fiebre prolongada
Si usted o alguien que conoce sufre fiebre asociada a dolor de cabeza, dolor de garganta, sudoración, escalofríos, sofocos o síntomas similares y la temperatura se ha disparado, es el momento de acudir al médico. A menudo no tendrá tiempo de pedir cita, por lo que visitar un lugar como Alamo City Urgent Care puede ser esencial para obtener un diagnóstico y un tratamiento rápidos. Para más información, visite este sitio web: https://alamocityuc.com