La primera pirámide alimentaria se creó en los años 70 en Suecia. A raíz de las numerosas protestas callejeras derivadas del elevado precio de los alimentos, el gobierno decidió crear un comité especial al que se le encomendó la tarea de evaluar si era posible elaborar comidas nutricionalmente equilibradas a un coste razonable.
En 1974, la primera pirámide alimentaria se presentó al público con el siguiente mensaje: «Una dieta buena y saludable a un precio razonable».
Esta pirámide estaba formada por 3 partes:
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La base incluía los alimentos básicos considerados esenciales para el bienestar del individuo: cereales, productos lácteos, pasta y patatas.
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El centro y la parte superior de la pirámide representaban los alimentos complementarios que aportaban las vitaminas y los minerales que no se encontraban en los alimentos básicos.
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La fruta y la verdura se situaban en el centro, y la carne, el pescado y los huevos en la parte superior.
Popularización del concepto
El concepto de representación visual de las recomendaciones dietéticas de las autoridades sanitarias de varios países se extendió entonces a otros países, como Japón, Dinamarca y Sri Lanka. Estados Unidos adoptó la pirámide alimentaria en 1992. Aunque la pirámide alimentaria sigue vigente, las recomendaciones dietéticas han adoptado desde entonces otras formas, como un plato en Estados Unidos (2010), una bandera en Tailandia (2010), una pagoda en China (2007), un arco iris en Canadá (2007) y una peonza en Japón (2010).