1. Poner la cebolleta y el ajo en una batidora. Quita el tallo del bonete escocés y ponlo entero. Este pimentón tan picante hará que te den cosquillas en las manos o en los ojos si te mancha el jugo, así que esto es lo más seguro.
2. Añade el resto de las hierbas y especias. Exprimir el zumo de lima y añadir el azúcar, la melaza y la soja. Sazonar bien y batir todo en la batidora hasta que sea una pasta áspera. Debe ser lo suficientemente líquida como para que caiga de una cuchara. Añada el zumo de otra lima o una cucharada de agua si está demasiado seco. Esta es su marinada jerk.
3. Haga dos o tres cortes en la piel de cada muslo de pollo. Si su olla de cocción lenta cabe en la nevera, colóquelos directamente en la olla de cocción lenta con la piel hacia arriba. Vierte unos dos tercios de la marinada de jerk sobre todos ellos y, con las manos enguantadas o una espátula, revuélvelos para cubrirlos bien con la marinada. Si no te cabe en la olla, utiliza una bolsa de congelación o un tupperware. Deja marinar el pollo toda la noche en la nevera. Reserve el adobo restante.
4. Al día siguiente, añada el adobo restante al pollo en la olla de cocción lenta para que cubra bien la piel del pollo. Esto ayuda a formar una bonita costra en la carne que da un efecto de barbacoa. Pon la tapa en la olla de cocción lenta y cocina el pollo a fuego alto durante 8-9 horas. Esto hará que el azúcar y la melaza se caramelicen en la piel y que la carne quede increíblemente tierna. Sirve el pollo a la brasa con arroz y un poco de ensalada de col crujiente.