Tratamiento de la insuficiencia renal en gatos
En función de la gravedad de los síntomas de su gato, el tratamiento de los gatos con insuficiencia renal suele ser una mezcla de intervenciones médicas y dietéticas.
Medicación para los riñones de los gatos
Desgraciadamente, no existe ningún medicamento que pueda curar la insuficiencia renal. Sin embargo, su veterinario puede recetar medicamentos para ayudar a las afecciones asociadas que pueden desarrollar los gatos con insuficiencia renal, como la hipertensión y la anemia.
Dieta renal para gatos
Una dieta especial puede reducir los signos de insuficiencia renal y ralentizar la progresión de la enfermedad. Su veterinario puede sugerir una dieta de prescripción cuidadosamente adaptada que ha sido formulada para satisfacer las necesidades específicas de su gato. La proteína de la comida para gatos con insuficiencia renal es altamente digerible, por lo que no hay muchos residuos que los riñones deban eliminar. También tiene una cantidad reducida de fósforo y ácidos grasos esenciales que funcionan como antiinflamatorios naturales para ayudar a los riñones de su gato.
Una de las desventajas de las dietas de prescripción es que se elaboran siguiendo recetas muy estrictas, por lo que no son tan sabrosas como la comida habitual de su gato. Incluso si su gato rechaza la dieta al principio, lo que es bastante probable dado que su sentido del gusto es 200.000 veces más sensible que el suyo, es importante que persevere por el bien de su gato, ya que al final se convencerá.
Cuando alimente a gatos con enfermedades renales, introduzca su nueva dieta de forma muy gradual para que pueda adaptarse lentamente a los sabores más suaves y a las diferentes texturas. A menos que el veterinario diga lo contrario, mezcle bien la nueva dieta con la dieta original de su gato. A continuación, aumente la cantidad de la nueva dieta en cantidades muy pequeñas cada día mientras, al mismo tiempo, reduce la cantidad de su dieta original. Es posible que las cantidades difieran de su antiguo alimento al nuevo alimento para gatos, así que compruebe el envase o pida consejo a su veterinario sobre el tamaño de las raciones.
Mientras su gato se acostumbra a su nuevo régimen, es posible que prefiera comidas más pequeñas con mayor regularidad en lugar de una o dos comidas más grandes. Tendrá que evitar darle golosinas cuando esté con su dieta especial para gatos, por lo que una alimentación más regular podría ayudar.
También puede intentar hacer que su nueva dieta para gatos sea más apetecible calentando la comida húmeda en el microondas (nunca caliente) para liberar los aromas y suavizar su textura. Si la nueva dieta de su gato es seca y está acostumbrado a la comida húmeda, pruebe a sumergirla brevemente en agua caliente para ablandarla un poco.
El proceso de cambio puede durar entre dos y seis semanas, pero merece la pena el esfuerzo para que su gato esté lo más sano posible. Tanto usted como su gato deberían poder disfrutar de una vida sana y feliz juntos sin ninguna preocupación.