Una infección dental no es nada divertida, y sin el tratamiento adecuado, puede extenderse a otras partes de su cuerpo. Esto puede conducir a complicaciones graves, y puede ser una amenaza para la vida. Su boca está llena de bacterias procedentes de los alimentos que ingiere y de la saliva y la placa. Estas bacterias pueden entrar en el diente y provocar un absceso dental. El absceso dental es una bolsa de pus que se forma dentro de tu diente o encías. La buena noticia es que las infecciones dentales o «abscesos dentales» son fácilmente tratables. Siempre y cuando no se retrase el tratamiento. Siga leyendo mientras hablamos de los signos de que una infección dental se está extendiendo, y de las complicaciones que pueden surgir si no recibe una atención dental rápida.
Signos y síntomas de que una infección dental se está extendiendo
Aunque es raro que una infección dental o «absceso dental» se extienda a otras partes del cuerpo, puede ocurrir. Y, si ocurre, las consecuencias pueden ser bastante graves. Si sospecha que una infección dental puede estar extendiéndose, no debe aplazar la visita a su dentista, sino que debe solicitar tratamiento lo antes posible. Estos son algunos de los signos y síntomas a los que hay que prestar atención y que pueden indicar que la infección dental se ha extendido…
hinchazón en la cara, cuello o mejillas
-dolor en la boca y la lengua
-náuseas y vómitos
-sensación de picor en la piel
-fiebre alta
-confusión
-dificultad para respirar
-dolor de cabeza persistente
-visión doble, o pérdida de visión
-párpados caídos
-deshidratación
-orina más oscura
– pulso acelerado y mareos
-su frecuencia respiratoria aumenta a más de 25 respiraciones por minuto
Si una infección dental no se trata, puede extenderse a la cara y/o al cuello. Las infecciones graves pueden trasladarse a partes aún más distantes de su cuerpo. En casos raros, la infección puede convertirse en sistémica, lo que puede afectar a múltiples tejidos de todo el cuerpo. También puedes correr el riesgo de padecer osteomielitis, que es una infección del hueso que rodea los dientes. Podría correr el riesgo de padecer celulitis, que es una infección de la piel y la grasa situada directamente debajo de la piel. La trombosis del seno cavernoso es otra infección que puede surgir en una infección dental no tratada. Se trata de una infección de los vasos sanguíneos de los senos paranasales. Podrías experimentar un absceso parafaríngeo, que es un absceso situado en la parte posterior de la boca. Por último, podría producirse una sepsis, que es una enfermedad grave en la que el sistema inmunitario reacciona de forma exagerada a la infección en la sangre. Si experimenta alguno de estos síntomas, acuda a su dentista inmediatamente.
Tratamiento de una infección dental
Hay muchas maneras de que su dentista trate una infección dental. El tipo de tratamiento depende de varios factores, como el grado de propagación de la infección y la ubicación inicial del absceso. Siga leyendo mientras le explicamos los diferentes tratamientos posibles para una infección dental.
Tratamiento de conductos: Puede ser necesario recibir un tratamiento de conductos. Esto puede ayudar a tratar los abscesos profundos dentro del diente. El procedimiento requiere que el dentista perfore el diente y elimine la bolsa de pus y bacterias en la raíz del diente. Una vez terminado, el dentista rellena el espacio con un material llamado gutapercha. Una vez curado el diente, el dentista puede restaurar el diente con una corona o un empaste para evitar que vuelva a producirse una infección.
Apicectomía
Cuando un tratamiento de conductos no es suficiente para solucionar la infección del diente, puede ser necesario realizar una apicectomía, o una resección del extremo de la raíz. Se trata de un procedimiento que consiste en abrir las encías para eliminar el extremo de la raíz del diente junto con cualquier otro tejido infectado.
Antibióticos
Se le pueden recetar antibióticos para reducir la infección del diente, y para evitar que la infección se extienda más. Si se ha determinado que la infección ya se ha extendido, es posible que tenga que tomar un curso prolongado de antibióticos. Si la infección se ha extendido tanto que ahora es grave, es posible que tenga que permanecer en un hospital para recibir los antibióticos a través de un goteo intravenoso.
La infección del diente se drena
En algunos casos puede ser necesario drenar el pus directamente del lugar de la infección. El drenaje para eliminar el pus de un absceso en la parte posterior de la boca puede ocurrir en la oficina de su dentista.
Aunque la mayoría de las infecciones dentales pueden tratarse fácilmente, el tratamiento nunca debe retrasarse. Los retrasos en el tratamiento adecuado pueden hacer que la infección dental se extienda a otras partes del cuerpo. Si una infección dental se extiende, podría ser mortal. Por lo tanto, si sospecha que tiene una infección dental, busque tratamiento dental inmediato. La forma más eficaz de prevenir una infección dental es tener una buena higiene bucal. Limite su consumo de azúcar, cepíllese los dientes y use el hilo dental dos veces al día, y visite a su dentista para que le haga limpiezas y exámenes regulares.