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«Un médico que se trata a sí mismo tiene un tonto por paciente»
Sir William Osler (1849-1919) es conocido como el padre de la medicina moderna por haber revolucionado la forma en que se impartía la educación médica durante su mandato en la Escuela de Medicina Johns Hopkins. Osler desempeñó un papel fundamental en el establecimiento del sistema de prácticas y residencias, y también instituyó el método de formación de los estudiantes a la cabecera del paciente.
Osler era conocido por decir: «El que estudia medicina sin libros navega por un mar desconocido, pero el que estudia medicina sin pacientes no se hace a la mar»
Osler era un «hombre bajito y enjuto, con un bigote en forma de manillar… un impulso incontrolable de hacer bromas pesadas…», lo que le metía frecuentemente en problemas. En una ocasión, Osler engañó a una respetada revista médica para que publicara los resultados de un médico imaginario, Egerton Yorrick Davis. A partir de entonces, la revista se negó a publicar o aceptar cualquier trabajo de Osler, incluso si se basaba en hechos legítimos.
Canadiense de origen británico, Osler comenzó su carrera en el Colegio Médico de Toronto, y se graduó como médico en 1872 en la Universidad McGill de Montreal. Como solía ocurrir en aquella época, Osler amplió sus conocimientos sobre las diferentes normas médicas estudiando en Londres, Berlín y Viena. Fueron sus experiencias en estos entornos las que le ayudaron a moldear sus mejores prácticas para la educación médica, y le convirtieron en un líder de la medicina interna. La destreza de Osler en el campo de la medicina no tardó en ser reconocida cuando fue elegido miembro del Real Colegio Británico de Médicos en 1883.
En 1888, Johns Hopkins reclutó a Osler de la Facultad de Medicina de la Universidad de Pensilvania para que fuera médico jefe del recién creado Hospital Johns Hopkins, y profesor de medicina en la facultad de medicina. Osler fue uno de los «cuatro fundadores» de la facultad de medicina, que incluía a líderes médicos como William H. Welch, Howard A. Kelly y William S. Halsted.
Al ser un profesor de medicina muy respetado, Osler dio forma a la manera en que la Facultad de Medicina de Johns Hopkins enseñaba a sus estudiantes. Creyendo en el aprendizaje a través de la práctica, Osler organizó la instrucción clínica a la cabecera del paciente, sintetizando lo mejor de los métodos europeos, británicos y estadounidenses de aprendizaje médico.
«Es mucho más importante saber qué tipo de paciente tiene una enfermedad que qué tipo de enfermedad tiene un paciente», según Osler. El innovador libro de William Osler, The Principles and Practice of Medicine (Principios y práctica de la medicina), esbozó este nuevo plan de estudios, y es el «texto de referencia de la medicina interna».
Osler fue un clínico de gran prestigio y un estimado diagnosticador. En 1905 aceptó la cátedra Regius de Medicina de la Universidad de Oxford, que en aquella época era el nombramiento médico más prestigioso. Osler, uno de los más grandes maestros de nuestro tiempo, comprendió que la forma en que se hacían las cosas no siempre era la mejor manera de lograr un objetivo. El aprendizaje médico, como todas las cosas, está en constante evolución, y es importante luchar contra el estancamiento del pensamiento.
Los dejaré con unas sabias palabras de Sir William Osler.
«No vivas ni en el pasado ni en el futuro, sino deja que el trabajo de cada día absorba todas tus energías, y satisfaga tu más amplia ambición.»
Acerca de Danielle Ligenza
Danielle Ligenza fue anteriormente directora de comunicaciones y relaciones públicas en la sede de Barton Associates en Peabody, MA. Se licenció y obtuvo un máster en Ciencias Políticas en la Universidad de Boston, y se doctoró en Derecho en la Facultad de Derecho de Notre Dame.