Las lesiones medulares se dividen en dos tipos: incompletas y completas. Una lesión medular incompleta es aquella en la que el lesionado todavía tiene partes del cuerpo funcionales situadas por debajo de la parte del cuerpo afectada. Una lesión medular completa es aquella en la que el lesionado no puede mover nada por debajo de la parte del cuerpo afectada.
Lesión medular incompleta
Las lesiones medulares incompletas son más comunes que las completas. Más del 60% de todas las lesiones de la médula espinal son incompletas. Esto se debe a que los profesionales médicos conocen las formas adecuadas de responder a este tipo de lesiones para evitar que se compliquen. Hay tres tipos comunes de lesiones medulares incompletas:
- Síndrome de la médula anterior
- Síndrome de la médula central
- Síndrome de Brown-Sequard
Una lesión anterior se encuentra en la parte delantera de la médula espinal. En este tipo de lesión las vías sensoriales y motoras están dañadas. Una lesión central se encuentra en el centro de la médula e implica daños en los nervios. Una lesión de Brown-Sequard se produce cuando se ha lesionado un lado de la médula espinal.
Lesión medular completa
Las lesiones medulares completas son menos comunes pero más graves. Hay tres tipos de lesiones medulares completas:
- Tetraplejia
- Paraplejia
- Triplejia
El tipo más grave de lesión medular completa es la Tetraplejia. Provoca parálisis y puede afectar a todas las extremidades. Su ubicación en la columna cervical determina la gravedad de esta lesión. La paraplejia implica que el lesionado pierda completamente el movimiento y la sensibilidad de las partes del cuerpo. La triplegia suele ser el resultado de complicaciones derivadas de una lesión medular clasificada como incompleta.